Preguntas frecuentes

Cuando las personas vivimos dificultades, las afrontamos con nuestras propias herramientas y conseguimos salir adelante. Pero otras veces, por más que lo intentemos, no podemos con las cosas que nos están afectando. Llegar a ese punto no es señal de debilidad ni de fracaso, solamente nos indica que nos faltan estrategias. La terapia es el espacio que nos va a ayudar a encontrarlas.

Aunque todas las personas enfrentamos situaciones difíciles a lo largo de nuestra vida y atravesamos rachas muy complicadas, no es necesario ni deseable llegar a un punto muy insostenible de sufrimiento para buscar ayuda profesional. Si simplemente hay algo que quieres mejorar y no sabes cómo hacerlo, entonces la terapia podría ayudarte

La duración de la terapia no suele ser estándar. Habitualmente las personas empiezan a identificar cambios a partir de la cuarta sesión, y los procesos suelen tener una duración típica de entre diez y treinta sesiones. Serán más, o menos, en función de cada caso particular: las dificultades, los recursos, la motivación, los intentos previos…

Absolutamente. La terapia no solo trata problemas específicos; también es valiosa para el crecimiento personal, el autoconocimiento y la mejora de la calidad de vida. De hecho, el único requisito para empezar a acudir a terapia es tener un objetivo, que habitualmente suele ser estar mejor.