Sobre mí

Siempre he tenido mucho interés en comprender cómo funcionan las personas: por qué piensan, sienten y actúan cómo lo hacen. Cuando descubrí que la psicología tenía esas respuestas y además es capaz de cambiar las vidas de las personas, mi pasión y compromiso con la disciplina se volvió absoluto y me decidí a estudiar el Grado en Psicología en la Universidad Autónoma de Madrid. Posteriormente, realicé el Máster de Atención Psicológica en Situaciones de Crisis, Emergencias y Catástrofes. En esta formación pude aprender muchas cosas sobre el trabajo en situaciones de extrema delicadeza como atentados, desastres naturales, intentos de suicidio o accidentes de tráfico. Además, cursé el Máster en Psicología General Sanitaria, que nos habilita a los psicólogos para ejercer como terapeutas. Fue aquí donde terminé de adquirir toda la formación básica imprescindible para ser una buena terapeuta. No obstante, mi formación no terminó ahí. Paralelamente he seguido especializándome y aprendiendo sobre la intervención terapéutica de enfoques como la Terapias de Aceptación y Compromiso, la Terapia Cognitivo Conductual o la Terapia Sistémica. Del mismo modo, he realizado diferentes cursos más específicos para aprender sobre ideación suicida, depresión, ansiedad, estrés post traumático, baja autoestima, perfeccionismo, gestión de conflictos… y sigo en constante formación.
Desde hace varios años tengo el privilegio de acompañar a las personas en sus procesos terapéuticos, una experiencia que me ha enseñado la riqueza y profundidad de cada historia. Comencé en Consejo y Salud MMG Asociadas, donde tuve mis primeros casos junto a una co-terapeuta para aprender de forma colaborativa y profundizar en distintos enfoques. Posteriormente, decidí lanzarme a trabajar de manera independiente y empecé a colaborar con PsicoLink, donde ofrecí terapia presencial en Madrid Centro y en el Centro de Psicología Bewernick, donde pude extender la atención a Madrid Sur. Paralelamente, he llevado procesos terapéuticos online por mi cuenta e inicié una colaboración en línea con María Bernardo Psicología, lo cual me ha permitido ampliar mi alcance y ofrecer apoyo a personas que prefieren esta modalidad. Durante este tiempo, he trabajado con personas que enfrentan gran variedad de dificultades. Mi experiencia abarca desde casos relacionados con bajo estado de ánimo, ansiedad, estrés académico, insatisfacción vital o rupturas sentimentales, hasta situaciones más complejas como duelos patológicos, traumas, ideación suicida o conflictos familiares profundos. Estas experiencias me han permitido aplicar distintos métodos y técnicas de intervención, adaptándome a las necesidades únicas de cada persona. Además, aunque trabajo principalmente con población adulta, también he tenido la oportunidad trabajar con adolescentes.
Mucho antes de habilitarme como Psicóloga General Sanitaria, sentí la necesidad de empezar a acumular toda la experiencia posible para desarrollarme profesionalmente y para enriquecer también mis habilidades humanas. Esta búsqueda me ha llevado a colaborar con diferentes servicios y asociaciones voluntarias. Una de mis primeras experiencias fue con la Fundación ANAR, donde atendía llamadas de menores y familias en situaciones de riesgo. En este servicio se ofrece atención psicológica, social y jurídica ante situaciones de maltrato familiar, acoso escolar, desapariciones, ideación suicida… Durante mi tiempo allí aprendí la importancia de dar una estructura, y lo imprescindibles que son la escucha activa y el sostén emocional en esos momentos de vulnerabilidad. Posteriormente colaboré con SAMUR – Protección civil, conociendo de primera mano la parte más cruda de las emergencias y el trabajo en crisis, un trabajo que puede marcar la diferencia en las vidas de las personas afectadas. Además, durante varios años fui voluntaria en Cruz Roja, participando en proyectos como Éxito Escolar, donde se ofrecía apoyo psicoeducativo a menores en riesgo de exclusión. Todas estas experiencias han reforzado mi compromiso con una atención integral y me han enseñado la importancia de adaptarse a las necesidades de cada persona, especialmente en situaciones de sufrimiento.
Fuera de la consulta, mis dos hobbies principales son el cine y viajar. No me pierdo los estrenos que me llaman la atención, no me importa repetir películas que he visto mil veces, y siempre estoy añadiendo más y más cosas a mis listas de «pendientes». Por ejemplo, una de las series que más me gusta es Black Mirror por su capacidad de explorar dilemas humanos y éticos muy actuales. Entre películas no puedo elegir favoritas. No me decanto por un solo género sino que disfruto de la ciencia ficción, la comedia, las películas románticas o los thrillers. Creo que las historias, sean del tipo que sean, tienen el poder de conectarnos, emocionarnos, invitarnos a reflexionar… por eso también me gusta compartirlas en las sesiones y en redes sociales si siento que pueden ayudar. Con los viajes me pasa un poco igual, sean escapadas cerca de mi zona, un poco más distantes en otras comunidades de España, o fuera de las fronteras del país; si puedo, no voy a dudar en aceptar la oportunidad de conocer lugares nuevos. De entre los sitios que he podido visitar hasta ahora, los que más repito y tienen un lugar especial en mi corazón son Asturias (Ribadesella, Llanes, Lagos de Covadonga… con esos paisajes verdes) e Italia (Milán, Roma, Florencia, Venecia… con tan rica gastronomía y patrimonio artístico).
Además, últimamente estoy redescubriendo mi gusto por la lectura más allá de los libros de psicología, y tratando de volver a devorar novelas.
Darle importancia a las cosas pequeñas es lo que hace que la vida sea grande.
- B.F. Skinner